jueves, 18 de octubre de 2012

LUIS “LULA” DA SILVA: “UN PRESIDENTE NO LO SABE TODO, DEBE ESCUCHAR A LA SOCIEDAD”



“Un presidente no lo sabe todo. Hay que escuchar a toda la sociedad”. La sentencia del ex presidente de Brasil, Luis “Lula” Da Silva, llegó a la hora de las preguntas del público y fue, tal vez, la única que pudo haber sonado como una crítica al estilo de gestión de Cristina Kirchner. Fue anoche, en el coloquio de IDEA donde Lula fue la estrella indiscutida.
Visiblemente más delgado, con un portuñol por momentos difícil de entender y un traductor cubano que lo hizo más fácil, Lula se mostró como esos tipos que soportan la adversidad con entereza y tuvo anoche actitudes y palabras que muchos añoraban. Decididamente, se puso a todos en el bolsillo.
Entre la multitudinaria audiencia de empresarios, políticos y gremialistas, y sin miembros del Gobierno a la vista, Lula, con picardía, eligió como interlocutor a José Manuel de la Sota, a quien nombró cuatro veces en su discurso sin ignorar que es el más opositor de los gobernadores. Antes de hablar y durante la comida posterior fue notable cómo se acercaron a la mesa para la oportunidad de una foto desde Hermes Binner, Claudio Lozano, Victor de Genaro y Hugo Moyano hasta María Eugenia Estenssoro.
Durante el discurso de más de una hora le festejaron cada gesto. Desde que como obrero tomaba cognac y como ex presidente, sólo agua, hasta que quiere que el FMI le venga a pedir consejos a la Argentina y Brasil sobre cómo salir de la crisis financiera internacional, por lo que se ganó una ovación. Lula atrapó con su simpatía y llamó al “diálogo y a la participación” como forma de construir.
A diferencia de Cristina, Lula remarcó: “América del Sur vive uno de sus ciclos positivos más importantes es una turbina del crecimiento mundial”. Y cuando se preguntó a si mismo cómo había hecho Brasil, dijo: “Tuvimos rigor macroeconómico con agenda social, respetamos las reglas, las instituciones, hay estabilidad jurídica y de precios”.
Cómodo, como si estuviera en su casa, Lula hilvanó un discurso con varios puntos de contacto con el de su “amiga” –como la llamó– Cristina Fernández de Kirchner: independencia frente a Estados Unidos y promoción del consumo interno como una forma de preservar el empleo y la industria. Sin embargo, también dijo algunas palabras que la Presidenta jamás usaría, como que Brasil crecía y “la inflación sigue controlada y eso es importante”, con lo que también se ganó aplausos. O que “Dilma (Roussef, su sucesora en la presidencia de Brasil) mantuvo el rigor fiscal”, otro concepto que es muy poco probable que aparezca en las cadenas nacionales de Cristina.
“Que el Estado regule pero de una manera adecuada”, eligió Lula como una forma de justificar los 17,6 millones de empleos creados en su gestión entre 2003 y 2011. “Las empresas argentinas siempre serán muy bienvenidas, los empresarios argentinos y brasileños tienen que construir alianzas”, explicó. “Los brasileños no tienen que comprar sólo empresas argentinas, tienen que asociarse con socios argentinos para poder formar empresas juntas y disputarle a las grandes empresas del mundo”, añadió.
“Gracias (José) De la Sota, cada vez que te reís me das tiempo de tomar agua”, repetía Lula, que saludó a los gobernadores presentes pero siempre buscó la complicidad con el cordobés, que fue embajador argentino en Brasil cuando Lula era un dirigente de la oposición. Los gobernadores Bonfatti y Urtubey observaban con cierta resignación.
Para terminar, y como no podía ser de otra manera, cerró con frases para la tribuna futbolera. “Ustedes se pasaron 20 años diciendo que Maradona es mejor que Pelé. Ahora Messi debe ser el mejor jugador del mundo. Por favor no hagan con nosotros en este Mundial lo que nos hizo Uruguay en 1950. Perder con Uruguay es aceptable, pero perder con Argentina sería terrible. No nos hagan pasar esa pesadilla”, pidió con humor.

Clarín de Argentina (www.clarin.com/politica)






LULA DA SILVA: "LA DEMOCRACIA ES ALTERNANCIA"

En una entrevista con LA NACION, habló sobre reelección, inflación y libertad de prensa
                                                                  
La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)
                                                          
Luiz Inacio Lula da Silva no se siente muy a gusto con el traje de ex presidente. Consciente de que a casi tres años de dejar el cargo sigue siendo tal vez la voz más escuchada de América latina, habla con la convicción de un hombre que todavía puede darles algunas lecciones más a sus viejos aliados.
Pese a que siente una debilidad irrefrenable por sus compañeros de ruta, no anda con vueltas. De visita en la Argentina , elogió como de costumbre a Hugo Chávez, Evo Morales y Cristina Kirchner. Pero, sorpresivamente, pareció presumir de haberse comportado muy distinto que ellos en temas sensibles como la relación con los medios , la inflación y la reelección indefinida .
"La democracia es un ejercicio de alternancia de poder", dijo en una entrevista exclusiva con LA NACION Lula, de visita en el país para participar en el coloquio de IDEA.
"La inflación es una desgracia para cualquier país, y principalmente para los trabajadores", sentenció, en palabras que difícilmente endulcen los oídos de la Presidenta, que ayer lo agasajó en la Casa Rosada.
El cáncer de laringe que sufrió el año pasado no parece haberle hecho mella. Sigue con la energía de siempre, y lo demuestra con el abrazo que imparte a un periodista que por primera vez se acerca a entrevistarlo, un gesto que sorprende en un estadista de su talla.
-Desde el estallido de la crisis de 2008 mucho se habló sobre le necesidad de un nuevo orden mundial. Países como Brasil pidieron un nuevo orden en el FMI y Ud. tuvo su lucha personal para obtener un asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU. ¿Qué falta para lograrlo?
-Primero, la reforma que queremos hacer en las instituciones multilaterales no depende de la crisis. La crisis apenas agudizó ese debate. Brasil hace por lo menos 15 años que lucha y reivindica para que la ONU sea reformada, y que tenga una representación del mundo geográfico y político correspondiente a 2012 y al siglo XXI y no que represente el mundo de 1948. No hay explicación para que apenas cinco países tengan el mando de los asuntos más importantes del mundo, sin que haya un representante de América latina, de África, sin un país con 1000 millones de habitantes como la India o Alemania. Queremos que la ONU y el Consejo de Seguridad sean representativos de la realidad de hoy, y no del pasado.
-¿Cree que eso está cerca de suceder?
-Pienso que ya hemos tenido una discusión más acalorada a nivel internacional. Por momentos parece que estamos llegando al final del debate y pronto volvemos al punto de partida. Un ejemplo de ello es la OMC, donde en 2008 estuvimos muy cerquita de llegar al acuerdo en Doha, y debido a las elecciones norteamericanas y a las elecciones en la India no pudimos lograr ese acuerdo. Y en estos últimos cuatro años nunca el gobierno norteamericano abordó ese tema de nuevo. Así que hubo un retroceso.
El FMI también tiene que ser reformado para que pueda funcionar como un banco que pueda ayudar a países en crisis y no como un banco para hacer presión en las economías de los países pobres. En las crisis actuales en Estados Unidos y Europa el FMI no sabe qué hacer, ¡nadie ni siquiera quiere escuchar al FMI! ¡Es como si no sirviera para nada! Da la impresión de que fue creado para la Argentina o Brasil o Bolivia o México, y no para Alemania ni Grecia. Es por eso que nosotros queremos hacer un debate. (Pide agua y café. "Qué va a pensar un argentino que no le ofrecen un café o agua", bromea).
Es por eso que nosotros los latinoamericanos, los africanos, los países de Medio Oriente tenemos que pelar cada vez más, porque los que están al mando de la ONU no quieren renunciar a eso. Si los que estamos fuera no peleamos, los que están dentro no van a ofrecer una silla para entrar.
Vea, por ejemplo, una cosa importante, como la cuestión de Irak. Ya es momento de que el gobierno norteamericano, de que el gobierno británico y sus aliados que invadieron Irak expliquen por qué invadieron Irak. Porque armas químicas no había, y todo el mundo lo sabía. ¿En nombre de qué lo hicieron?
Veamos el caso de Irán. Todos los días yo veo noticias que dicen que Irán quiere construir una bomba atómica. Yo no creo en eso. Yo deseo para Irán lo mismo que deseo para Brasil: utilizar la energía nuclear para fines pacíficos. Y con esa idea yo fui a Irán. Los miembros del Consejo de Seguridad nunca habían conversado con [Mahmoud] Ahmadinejad. La política fue tercerizada, se colocan asesores para conversar y los presidentes nunca conversan. Y cuando yo dije que iba a conversar con Ahmadinejad para que él se comprometiera a aceptar las reglas que imponía el OIEA, dijeron que era ingenuo. Fuimos a Irán, estuvimos dos días junto con Turquía, y conseguimos que Irán se comprometieran con lo que los norteamericanos y la Unión Europea querían. Para mi sorpresa, cuando Ahmadinejad aceptó y nosotros presentamos un documento firmado, ¿qué paso? Sancionaron a Irán. ¿Por qué? Porque no era aceptable que un país del Tercer Mundo hubiera conseguido lo que ellos no consiguieron.
-Irán además del plan nuclear tiene otras cuestiones censurables como el apoyo a Hezbollah y al terrorismo internacional. Funcionarios iraníes están acusados por la Argentina del atentado en la AMIA...
-Déjame decirte una cosa, en aquel entonces la discusión se centraba en la cuestión nuclear. Yo no acostumbro, ni cuando era presidente y mucho menos ahora, opinar sobre las políticas internas de los países, a menos que tenga que ver con Brasil. Me parece que de eso se trata la soberanía Las relaciones de Irán con Estados Unidos, con la Argentina, es un problema de cada país. Pero en lo que se refiere a la cuestión nuclear creo que están equivocados los que piensan que Irán va a fabricar la bomba atómica. Es muy viva la idea de que todos los años hay un culpable de alguna cosa para justificar tu discurso, cuando en realidad lo que el mundo necesita es paz, desarrollo, generación de empleos. Si no le das esperanzas a la juventud y oportunidades a los jóvenes, no habrá paz en el mundo jamás, y es bueno que sea así. Es buena que la sociedad se mantenga alerta, que reivindique, exija. ¿Porque qué fue la primavera árabe? Es diferente de la izquierda latinoamericana de los 60, que se movilizaba para llegar al poder. Yo fui invitado por Al-Jazeera para participar en un debate en Doha y allí me reuní con los jóvenes de Egipto y Túnez. Ellos no hablaban de poder, hablaban de dignidad, esperanza y democracia., que no lo han logrado todavía. Entonces es por eso que nosotros reivindicamos cambios en la institucionales multinacionales, son cambios necesarios. Y vea, no lo reivindico para Brasil, porque si ponemos [en el Consejo de Seguridad] a Brasil, o solamente a Sudáfrica, o a la India, sin cambiar el funcionamiento de la representación, entonces quedará en lo mismo. Aumentas de cinco a ocho, y sólo eso. Lo que pienso entonces es que el país de América latina -y creo que Brasil tiene derecho a eso por ser la mayor economía y la mayor población de la región- solamente tiene sentido que entre si va a hablar en la ONU en nombre de la región Y para hablar en nombre de la región hay que crear mecanismos para que los demás países decidan junto con Brasil-
-¿Podría ser la Unasur?
-Si, podría ser la Unasur.
-Quería preguntarle ahora sobre Venezuela. Usted apoyó abiertamente la reelección de Hugo Chávez...
-No, no, no... (se ríe)
-Dijo que la victoria de Chávez era su victoria...
-Yo eso lo dije en un encuentro internacional que es el Foro de San Pablo, yo no lo dije para la campaña electoral.
-De acuerdo, pero usted estaba a favor de la reelección. La pregunta es si cree que es bueno para la democracia venezolana y para la de la región que una misma persona este 20 años al frente del poder.
-Mire, yo le puedo contar mi experiencia. En 1978 me reeligieron presidente de mi sindicato con el 92% de los votos. Tomé posesión el día 24 de abril. A la semana siguiente convoque a una asamblea y decidí que ningún presidente del sindicato pudiera ser presidente más de dos veces. Cuando estaba en la presidencia de la República y tenía el 87% de aprobación, prohibí que mi partido, por medio de mis compañeros diputados, presentara cualquier tipo de enmienda proponiendo mi [segunda] reelección. ¿Por qué? Porque me parece que la democracia es un ejercicio de alternancia de poder, no solamente de personas, sino de sectores de la sociedad. Y yo estoy muy agradecido creo que pocos países del mundo pudieron alcanzar la proeza de Brasil de elegir un obrero metalúrgico como presidente.
-¿Pero si la alternancia es buena por qué entonces estuvo a favor de la reelección de Chávez?
-Yo no tengo incidencia en la política de Venezuela. No participo en los partidos políticos de Venezuela. Había una elección en Venezuela, donde dos personas se presentaron, Capriles y Chávez, y yo creía que Chávez sería mejor para Venezuela. Ahora creo también que el compañero Chávez debe empezar a preparar su sucesión. Porque la Constitución permite que Chávez sea candidato por cuarta vez, pero cuando él pierda los adversarios también podrían presentarse cuantas veces quieran, y eso no creo que sea bueno. Por eso es que yo mismo no quise un tercer mandato. Porque si lo hubiera hecho, hubiera querido un cuarto mandato, y después un quinto. Entonces si lo quiero para mi, es quererlo para todos. Y para la democracia, la alternancia de poder es una conquista de la humanidad, y por eso hay que mantenerla.
-Capriles dijo que quería imponer el "modelo Lula" en Venezuela, y las políticas económicas y sociales de Chávez son muy distintas de las que usted impuso en Brasil, y con resultados muy distintos. La exitosa lucha de su gobierno contra la pobreza no tiene un correlato en la Venezuela de Chávez. ¿Por qué entonces piensa que Chávez era lo mejor?
-Primero, no sé si usted fue a Venezuela...
-Sí..
-Bueno, entonces usted sabe que es necesario analizar Venezuela no en comparación con Brasil o la Argentina, ni con Europa. Hay que analizar la Venezuela de Chávez en comparación con la Venezuela antes de Chávez. Y mejoró mucho Venezuela, el pueblo pobre ha ganado dignidad. América del Sur ganó mucho con Chávez. Porque antes hasta los inodoros eran importados de Estados Unidos. Hoy importa de la Argentina, de Brasil, y de otros países. Venezuela empezó a mirar a América latina, y por eso defendí el ingreso de Venezuela al Mercosur. Por la importancia estratégica de Venezuela, es una de las reservas más grandes del mundo de petróleo y de gas, tiene un potencial energético extraordinario. Nosotros precisamos en cuanto Unasur discutir como hacernos socios de esa riqueza que tenemos. Por eso yo pienso que Chávez fue importante para Venezuela. Porque le está dando dignidad a la gente pobre, está mejorando a Venezuela. No hizo todo lo que tenía que ser, ciertamente que no, pero creo que Chávez maduró mucho. Yo lo conocí en 2003, y ha tenido una evolución extraordinaria, y también tiene que ver con la evolución política de América del Sur. Si usted ve lo que era América del Sur en 2002 y lo que es América del Sur hoy, avanzamos muchísimo desde todo punto de vista: avanzó desde el punto de vista político, avanzó desde el punto de vista social, ganó más respetabilidad en el mundo, mejoró la vida de mucha gente. Es una oportunidad fantástica que tenemos cuando todos nosotros nos estamos mirando de frente entre todos. Y no concuerdo como estábamos antiguamente, con Brasil que miraba hacia Estados Unidos, la Argentina hacia Estados Unidos y Europa, y no nos mirábamos hacia nosotros mismos. Entonces imagínate el potencial que tenemos cuando queremos trabajar y desarrollar nuestras potencialidades., nuestras semejanzas, y aprovechar para nosotros nuestra propia riqueza es algo extraordinario, y todavía estamos gateando. Estamos gateando porque muchas veces tenemos dirigentes que tienen un pensamiento sudamericano, pero al mismo tiempo hay una burocracia del país que tiene una cabeza más mirando hacia Europa y Estados Unidos, y eso dificulta. Es un proceso cultural, que va evolucionando poco a poco. Me acuerdo que hace no mucho tiempo que fue maravilloso para la Argentina cuando la economía fue dolarizada. ¿Cuánto tiempo duró la ilusión? Me acuerdo cómo era maravilloso cuando el real valía más que el dólar. ¿Cuánto tiempo duró? Yo recuerdo cuando los ministros de Hacienda de Brasil y de la Argentina se peleaban por ver quién era más amigo de Estados Unidos. Recuerdo cuando Fernando Henrique Cardoso se peleaba para ver quién era más amigo de Clinton. ¿Qué ganaron los países con eso? Brasil quebró tres veces. La Argentina quebró. O sea lo que pasó con la llegada de Kirchner, con mi llegada, con la llegada de Chávez, de Evo Morales, fue que las personas empezaron a percibir que nos respetábamos, que nos gustaban nuestros países, que empezamos a ver a nuestros países a partir de nuestra propia realidad. Eso cambió. Cuando llegué al gobierno la relación comercial entre Brasil y la Argentina era de 7000 millones. El año pasado fue de 40.000 millones de dólares.
-¿Pero no cree que la experiencia brasileña es distinta, que se respetaron más algunas libertades? Por ejemplo, usted siempre fui muy crítico con la prensa de su país, pero nunca llevó adelante una ofensiva contra los medios como está ocurriendo en la Argentina y Venezuela?
-Necesito tomar un café (bromea). Déjame contarte una cosa. Yo pienso que pocos líderes políticos del mundo fueron y son criticados por la prensa como yo. Sin embargo, yo no me quejo. Yo nunca tuve la prensa a mi favor, y no por eso dejé de ser el presidente con la mayor aprobación de mi país. Me parece que debemos creer en la sabiduría de los lectores, de los radioyentes y de los televidentes. Ellos sabrán juzgar los valores del comportamiento de un político, y también del comportamiento de la prensa. Cuando la prensa está exageradamente en contra, entonces nadie le cree. De la misma forma que nadie le cree cuando está exageradamente a favor. Pienso que el equilibrio, la serenidad, el compromiso con la verdad es lo que da credibilidad, tanto al político como a la prensa.
-¿Entonces cree que esta ofensiva contra la prensa en la Argentina y Venezuela puede ser incluso contraproducente para los gobiernos?
-Cada país vive su propia realidad, y hay que respetarla. Sí creo que en Brasil nosotros necesitamos instalar una discusión política sobre un nuevo marco regulatorio de los medios. La última regulación es de 1962, por lo tanto no hay ninguna explicación para que en el siglo XXI tengamos la misma regulación que en 1962, cuando no había teléfonos celulares ni internet. La evolución que hubo en las telecomunicaciones no está regulada. Esa pelea existe en la Argentina, en Venezuela, en México, donde Ricardo Salinas y Slim están en guerra todo el santo día. Y en Brasil preparamos en una conferencia nacional, donde participaron, partidos, medios de comunicación, participó la telefonía, y elaboramos una propuesta de regulación, que hay que discutirla con la sociedad. No hay modelo definitivo, no hay modelo de O Globo, de Folha, de Lula o de Dilma, eso no existe. Entonces vamos a empezar una discusión con la sociedad para saber qué es lo más importante par a que los medios de comunicación sean cada vez más retransmisores de conocimiento, de información, cada vez más libres y sin injerencia del gobierno. Y lo digo por mi experiencia, ustedes en la Argentina nos siguen bien de cerca. Yo aprendí a no estar reclamando y decir que la prensa es culpable de todo. Cada uno es responsable de sus actos. Yo soy responsable por mis actos, y la prensa es responsable por sus actos, y por eso seremos juzgados. Yo ya fui juzgado, yo fui reelecto en 2006, yo elegí a mi presidenta en 2010, así que he cumplido mi misión. Ahora espero que la prensa siga cumpliendo su misión de informar a la sociedad brasileña y al mundo entero.
-Algunas medidas económicas de la presidenta Cristina Kirchner despertaron críticas, como las restricciones al cambio de divisas, o las trabas a las importaciones. ¿Cree que en Brasil sería posible aplicar algunas de esas medidas?
-Creo que Brasil en otros momentos debe haber hecho cosas que la Argentina no hizo. La Argentina ahora está haciendo cosas que Brasil no está haciendo. Pero creo que cada presidente, cada ministro de Economía toma decisiones en función de la realidad específica de cada país. He leído sobre la Argentina y he notado que hay una preocupación en preservar dólares en la Argentina, no permitir un déficit comercial muy fuerte, no permitir déficit en el turismo. Puede ser una toma de posición de un momento específico de la economía. Esto no era así antes, entonces quién sabe de los problemas de la economía argentina son las personas que lidian con la economía argentina. Nosotros tomamos una decisión hace ya un tiempo, el cambio es flotante, y no piense que no había presión todo el tiempo de los exportadores, que querían que el dólar fuera más alto, los importadores querían que el dólar fuera más bajo. Y yo le decía a todo el mundo: el problema del cambio flotante es que fluctúa hacia arriba o hacia abajo, y así seguirá. Creemos que la mejor arma para el crecimiento de la economía es trabajar de manera muy fuerte para evitar la caída de nuestras exportaciones. Y creo que Brasil y la Argentina tienen un potencial de complementariedad excepcional. Yo aquí la dije a un empresario, y estaba presente la presidenta Cristina, que jamás un empresario argentino o brasileño pueden ver a Brasil y la Argentina como adversarios. Mientras más fuerte sea nuestra alianza, mientras más unidos estemos, más fuertes seremos, y más oportunidades de crecer tendremos. Cuando hay un problema coyuntural tenemos que tener la sabiduría de resolverlo conjuntamente, porque la verdad desnuda y cruda es que la Argentina y Brasil están unidas por un especie de cordón umbilical. Nosotros, separados, seremos débiles. Juntos, seremos muy fuertes.
-¿Cómo le recomendó a Dilma relacionarse con los Argentinos? Es cierto como dijo Pimentel el año pasado que somos "difíciles"?
-Creo que nadie tiene que ser fácil en una mesa de negociación. Es normal que los argentinos cuando se sienten en la mesa de negociación quieren defender con uñas y dientes sus intereses. Y también es normal que Brasil quiera defenderlos al otro lado de la mesa. Pero la inteligencia humana debe permitir que entre el 100% de los intereses de cada parte haya un denominador común que sea bueno para ambos, y es eso lo que hay que encontrar. Así funciona la política, así funciona una negociación.
-¿Qué futuro le ve al Mercosur, después de las últimas tensiones?
-Creo que lo que hicimos nosotros en América del Sur ya es mucho. El problema es que éramos países con una cultura colonizada, con una mente política colonizada. Fuimos adoctrinados para que nos veamos como adversarios, como enemigos, y los amigos estaban en el Norte. Cuando la verdad, no hay que tener enemigos ni en el Norte ni aquí. Tenemos que construir lo que sea bueno para la Argentina y Brasil. Recuerdo que hace no mucho tiempo celebramos reuniones donde muchos decían que el Mercosur ya no interesaba, que el Mercosur estaba acabado, y que había que implementar el ALCA. Hoy, ni el gobierno norteamericano habla del ALCA. Ni siquiera ellos. Un país como Uruguay, que es un país pequeño pero de una nobleza política extraordinaria, hace cuatro años se quejaba del Mercosur. Hoy, tengo la certeza de que ni siquiera piensan en hablar contra el Mercosur, porque solamente con Brasil tiene un flujo comercial de casi 2000 millones de dólares.
-En Paraguay deben pensar distinto, ¿cree que fue acertada su suspensión?
-Yo pienso que sí, porque no se puede permitir que la política se haga de esa manera.
-¿Independientemente de que la destitución de Lugo haya sido sin alterar el orden constitucional?
-Sinceramente creo que si no se respeta la voluntad popular que elige a las personas para cumplir un mandato, y si nos ponemos a sacar a las personas, creo que la democracia quedará debilitada. ¡Lugo terminaba su mandato el año que viene! Entonces creo que fue correcta la decisión del Mercosur. Obviamente que todos nosotros, la Argentina, Brasil, tenemos responsabilidades para intentar garantizar que haya tranquilidad en Paraguay, porque no queremos ninguna experiencia de conflicto, queremos experiencias de armonía y de paz, y de mucha democracia, porque sólo eso permite el crecimiento económico y la distribución de los ingresos.
-¿Piensa que fue acertada la decisión de Dilma de apoyar el avance de los países del ALBA sobre la CIDH y la relatoría de libertad de expresión?
-¡Si ella dio ese apoyo claro que es acertado! ¿Quién soy yo para disentir con mi presidenta? (risas) Me acuerdo en la toma de posesión hubo un sector de la prensa brasileña que se la pasaba diciendo que había divergencias entre nosotros dos. Yo decía: Nunca tendré una divergencia con Dilma, porque cuando la haya, ella va a tener la razón.
-La Corte brasileña confirmó las denuncias que se hicieron sobre el "mensalão", e incluso algunos cercanos colaboradores suyos ya fueron hallados culpables. ¿Hace alguna autocrítica?
-No me he manifestado sobre ese proceso, primero porque en aquella época era presidente de la república y creo que un ex presidente no puede estar opinando sobre la Suprema Corte. Principalmente cuando el proceso está en desarrollo. Vamos a esperar a que termine el proceso y entonces con certeza podré emitir mi opinión.
-¿Teme que usted también pueda ser juzgado por este caso?
-Yo ya fui juzgado. La elección de Dilma fue un juicio extraordinario. Un presidente con ocho años de mandato salir con 87% de aprobación es un tremendo juicio y no me preocupo para nada. No tengo preocupación alguna. Cada poder, ya se Ejecutivo, Legislativo o Judicial, tiene sus propias responsabilidades, y cada uno debe cumplir con la misma.
-¿Le preocupa la desaceleración económica de Brasil?
-Vamos a ser sinceros, hay una desaceleración económica promovida por el propio gobierno. Obviamente hay problemas con la crisis económica, pero sucede que en 2010 nosotros crecimos demasiado, el consumo era exageradamente alto y era necesario disminuir un poco ese ímpetu de la economía. Esa reducción del gobierno también fue afectada por la crisis internacional. Hubo disminución de las exportaciones, las exportaciones a la Argentina cayeron casi un 20%, hubo una disminución importante, y a nivel mundial la disminución fue sólo del 6%. Era necesario controlar la inflación. Las informes que tengo de la presidencia y del ministro de Hacienda es que la inflación está controlada, y para el próximo año Brasil volverá a crecer más o menos a 4,5%.
-¿Cree que peligroso para un país tener una inflación superior al 20%, como estiman las consultoras independiente que hay en la Argentina?
-Yo era líder sindical cuando la inflación en Brasil era del 80% al mes. La inflación es una desgracia para cualquier país, y principalmente para los trabajadores. Por eso, cuando asumí la presidencia y la inflación estaba en el 12% trabajamos muy fuerte, estableciendo una meta de 4,5%, y cumplimos esa meta, y se está cumpliendo ahora. Y esto representa un beneficio salarial extraordinario para los trabajadores. Así que la economía brasileña va muy bien ahora, va a terminar el año bien, va a comenzar 2013 muy bien. Brasil tiene varios proyectos de infraestructura en marcha que ya datan de 2007, a través del PAC, proyectos habitacionales, el petróleo. Por eso yo siempre bromeo que aunque queramos equivocarnos, Brasil va a funcionar. Lo único que no queremos, y no permitiremos, es que la Argentina trate de ganar la Copa del Mundo de 2014 (risas).
-¿Imagina alguna pesadilla peor que esa?
-No, no, no.
-¿Le gustaría volver a ser presidente?
-Eso no se discute en Brasil, porque creo que es un derecho genuino de la presidenta ser candidata a la reelección.
-¿Y no lo descarta más adelante?
-Un político nunca puede descartarlo. El problema es que cada vez que me hacen esa pregunta... Si yo digo que no lo descarto, la prensa dice:"Lula admite que va a ser candidato". Si yo digo lo contrario, dicen "Lula nunca más va a ser presidente". Yo soy un político, y creo que ya cumplí mi parte. Toda mi vida tuve la voluntad de probar que era capaz de hacer lo que yo reivindicaba, y creo que logramos hacer mucho más. Hoy, el principal legado que le hemos dejado a la sociedad brasileña, además de los 40 millones de brasileños que ascendieron a la clase media, además del aumento del salario mínimo, de los 17 millones de empleos formales creados, el principal legado es la relación entre el Estado y la sociedad. Llevamos a cabo 73 conferencias nacionales. Las principales políticas de mi gobierno fueron decididas en plenarios, donde había debates a nivel municipal, estatal y nacional. Eran políticas de todas las áreas, todo fue discutido. Quería probarme a mi mismo que un gobernante nunca, en hipótesis alguna, debe tenerle miedo a conversar con la sociedad. No podemos ver en cada persona que se nos acerca en la calle a un enemigo. Porque muchas veces tenemos que preguntarle por qué es enemigo ahora si él voto por mi. Quizás yo este equivocado.
-Ud. se recuperó de una grave enfermedad. ¿En qué lo cambió?
-El problema de la enfermedad es que todo el mundo piensa que eso le pasa a los otros. Creo que he salido de este cáncer más humanista, con una comprensión mayor del papel de nuestro pasaje por la tierra. No somos nada. Estamos obligados por nuestra insignificancia a ser buenos, a hacer el bien, a tratar bien a las personas, a caerle bien a las personas, a ser simpáticos. Entonces pienso que maduré. La fragilidad de la enfermedad te permite hacer reflexiones que uno normalmente no hacía antes, y creo que hoy soy un hombre más sensato, y con más ganas de trabajar. Hoy tengo más ganas que antes, creo que todavía me quedan muchas cosas por hacer.
-¿Por ejemplo?
-Sueño con la integración de América latina. La integración no es un discurso, debe transformarse en un acto cotidiano de cada ciudadano y de cada gobernante. Y todavía nos queda mucho por hacer.
Messi, sin comparación
"¿Cuántos goles hizo Messi ayer?" Con esa pregunta el ex presidente recibió a LA NACION, y no fue la única referencia que hizo Lula al fútbol.
"Antes nos peleábamos por saber quién era mejor, si Maradona o Pelé. Y claro que Pelé era mejor. En cambio, ahora no hay dudas: Messi es el mejor del mundo", dijo Lula, que ni atinó a mencionar a Neymar, a quien algunos ven como competidor.
Lula se cansó de repetir que la Argentina y Brasil deben ser aliados, pero avisó: "No vamos a permitir que levanten la Copa del Mundo en Río".





LULA DA SILVA: "YA NO TENGO AMBICIONES POLÍTICAS"
                                                                                                                                                                                                                                                                                                       
El ex presidente de Brasil dijo que sólo quiere ayudar a “mejorar la vida de los brasileños”. En el Coloquio de IDEA en Mar del Plata destacó su relación con la Argentina. De nuestra enviada.

Infobae de Argentina (www.america.infobae.com/notas)

Ningún empresario se quería perder la llegada de Luiz Inácio Lula da Silva a la ciudad de Mar del Plata, en la provincia de Buenos Aires. Es por eso que el 48º Coloquio de IDEA (Instituto para el Desarrollo Empresarial Argentino) superó los 900 inscriptos, todos con los ojos puestos en el ex presidente de Brasil.
Lula dio el discurso de apertura de uno de los encuentros anuales más importantes en el mundo empresarial del país, y fue un imán para muchos políticos y economistas argentinos. Todos buscaban la foto con el ex mandatario. “Voy a hablar despacio y tomar agua, porque aún tengo una enema en la garganta. Yo era líder sindical, bebía grapa. Ahora bebo agua”, dijo en referencia a su tratamiento contra el cáncer de laringe. Desde allí, todas las referencias a su enfermedad las hizo en formato chiste.
 Pero esa advertencia pasó desapercibida luego de una hora y diez minutos de discurso, en el que destacó el desarrollo económico de Brasil, la “gran amistad con Cristina Fernández de Kirchner” y el papel de América Latina en un mundo en crisis. Si bien dijo que los países desarrollados actuaron para evitar la quiebra del sistema financiero, “ignoraron a los trabajadores”.
 Algunas encuestas revelan que si se presenta como candidato presidencial, será elegido presidente una vez más. Pero en un ambiente repleto de empresarios y políticos, el ex presidente dio a entender que no buscaría un nuevo mandato “Ya no tengo aspiraciones políticas. Una persona de casi 67 años no tiene que pensar mucho en el futuro”, deslizó.
 Sin embargo, dijo que quiere ayudar a su partido político y a Dilma Rousseff, la actual presidente, para que finalice bien su mandato. “Ella está mucho mejor preparada que yo”, aseguró. “Un presidente no lo sabe todo y tiene que oír a toda la sociedad”. 
El líder de la Confederación General del Trabajo (CGT) de Argentina, Hugo Moyano, el político opositor Francisco de Narváez y el gobernador de Córdoba (centro del país), José Manuel de la Sota, eran de los privilegiados que escuchaban al ex mandatario desde las primeras filas.
 “Mis amigas y mis amigos”, decía todo el tiempo, refiriéndose a la audiencia. Con esa pequeña introducción, Lula hizo foco en los trabajadores en gran parte de su discurso. “Sacamos a 40 millones de personas de la pobreza”, aseguró. Un número que equivale a toda la población de la Argentina, había destacado antes Ignacio Stegmann, presidente del Coloquio. “Mi guerra en Brasil es contra la pobreza, la miseria y el hambre”, dijo.
En este sentido, remarcó la importancia de prestarle atención a América del Sur. “Cardoso y Menem competían por ver quién era más amiguito de Clinton. No soporto ver a gobernantes brasileños y argentinos tan cerca de los EEUU”, expresó. Mirar a kilómetros de distancia y no observar las fronteras es un error en el que Lula no quiere caer.
Y es por eso que el político comentó que “Brasil no tiene que crecer solo. No puede ser una isla cercada por países pobres”, agregó. La relación con la Argentina tuvo un capítulo aparte, pues dijo que “nunca hubo tanta amistad y confianza entre los gobiernos y los pueblos. Juntos seremos más prósperos y respetados en todo el mundo”.
El fútbol fue, sin dudas, el único sector donde Lula no se mostró interesado en zanjar diferencias. “No hagan con Brasil en este mundial lo que Uruguay hizo con nosotros en 1950. No nos hagan pasar por esa pesadilla”, recordó, ante un público que respondía con risas a cada una de sus ocurrencias. “Brasil tiene que mirar a la Argentina como prioridad y la Argentina a Brasil”, concluyó. 





LULA, MUY APLAUDIDO POR LOS ASISTENTES

Destacó la relación con Brasil y elogió a Chávez y Evo Morales

La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)

La expectativa era grande y no defraudó. El ex presidente de Brasil Luiz Inacio Lula da Silva se paró frente a líderes políticos y empresarios de la Argentina y les recitó lo que querían escuchar. Dijo que Brasil seguirá creciendo gracias a la solidez de su economía y de sus instituciones; vislumbró un futuro mejor para la región y luego sí, les habló al oído a quienes los escuchaban: Brasil decidió caminar de la mano de la región y con la Argentina marchando a su lado. "Tendríamos que imaginar qué es la Argentina sin Brasil y Brasil sin Argentina. Si actuamos coordinados el futuro será mejor para ambos."
Fue una hora y media en la que un Lula de tono amigable fue interrumpido varias veces por aplausos. "Crecer significa compromiso, responsabilidad y el ejercicio de mucha democracia. Todos los sectores, el cartonero, el empresario, el obrero, las corporaciones o las pymes. Todos los sectores fueron convocados porque yo partía de la base de que el presidente no lo sabe todo y tienen que oír a toda la sociedad", dijo.
Lo aplaudieron todos. Pocos minutos antes, en el cóctel que los empresarios argentinos compartieron mientras esperaban al orador principal, los hombres de negocios que participan del Coloquio enumeraban los principales activos de Brasil y, más allá de la potencia de su economía, rescataban los consensos y el diálogo que se construyó en los últimos años en el vecino país. Justamente al presentarlo, el presidente del Coloquio, Ignacio Stegman, había hablado de la necesidad de consensuar: "Es necesario que exista diálogo y acuerdos que permitan encontrar el balance entre creación y distribución de riquezas".
Luego Lula sí habló de política internacional y se encargó de dejar sentado que su gobierno y el de Dilma Rousseff entienden que es el momento de América del Sur. "El comercio Sur-Sur creció muchísimo desde 2001. Desde entonces el flujo entre estos países creció 23% y llegó a 3500 millones de dólares en 2011. Y sus exportaciones 19% frente a 12 % del comercio mundial. América del Sur vive uno de los momentos más prometedores de la historia", repasó.
Cuando se concentró en Brasil, Lula dijo que la palabra clave en su gobierno fue inclusión. "Dejamos de lado dogmas y ortodoxias y dijimos: crecer y distribuir al mismo tiempo. Perseguimos ese objetivo. Y la presidenta Dilma, también". Hubo párrafos para los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. "En 10 años hicimos con Dilma y con Cristina más que los que hicieron otros en 50 años en nuestros países."
Cuando todo era música para los oídos empresarios, Lula no se privó de defender a los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Bolivia, Evo Morales. "Hay que mirar lo que era Venezuela antes de Chávez. Es muy valorable lo que hizo. Como lo que hace Evo






Si cundiera el ejemplo, la firma de un acuerdo con Bolivia ayudará a cerrar los mares a los ladrones de la historia común
                                                      
ABC de España (www.abc.es)

Es un paso importante. Durante un viaje de la Reina a Bolivia, acaba de firmarse entre ambos países un memorando que permitirá la exposición en el país andino de parte de la carga de la fragata «Mercedes», expoliada por Odyssey Marine Exploration y recuperada en los tribunales de EE.UU.
Cambio en Bolivia
Bolivia, junto con Perú, fue el país más activo durante la larga batalla legal de España contra los cazatesoros. Perú llegó a personarse en el proceso en Tampa (Florida), mientras que Bolivia se limitó a agitar la leyenda negra y exigir parte de las monedas en compensación por lo que llamaron «la explotación de los recursos bolivianos» tras el Descubrimiento. Aunque Perú sí se mantiene en una postura que solo beneficia los intereses de los cazatesoros, este acuerdo con Bolivia plantea una nueva manera de ver las cosas en términos aceptables, de cooperación.
Para eso vale la diplomacia cultural. En presencia de Doña Sofía, se ha firmado el memorando, que pone bajo el auspicio de Unesco el criterio a seguir en este nuevo marco. Ambos países reconocen el pasado común y valoran el patrimonio que la historia compartida ha legado a nuestra generación. Además, y es importante, se declara que el patrimonio subacuático será objeto de protección (como manda la convención de la Unesco) y nunca de comercialización (como quieren los cazatesoros, para vender nuestra historia por piezas sin estudiarla científicamente). De hecho, el espíritu del documento expresa que el sumergido es Patrimonio de la Humanidad. No se puede decir mejor.
El cambio es importante, aunque el memorando queda pendiente de acuerdos más concretos. En América hay países, como México, que aplican verdadero rigor en la lucha contra los cazatesoros, a los que no permiten trabajar bajo condición alguna, y que son por ello un ejemplo para todos, incluidos para nosotros. Una empresa como Odyssey Marine Exploration nunca nos habría engañado si no hubiéramos tolerado su presencia en el Estrecho durante más de 6 años.
El caso lamentable de Perú
Pero también hay, desgraciadamente, quienes sirven, como Perú, y algunas repúblicas caribeñas, a los intereses espurios de los comerciantes de nuestra historia. Por ello es urgente valorar la importancia de la diplomacia cultural y el «tesoro» de la «Mercedes» nos brinda la oportunidad de compartir esa visión civilizada de un patrimonio que es de toda la humanidad y no se debe vender por piezas a fortunas privadas que además producen casos de fraude, como el recientemente destapado en Londres. Esto es también marca España, entendida como vocación de compartir nuestra cultura con las naciones hermanas de Iberoamérica.
En la «Mercedes» viajaba un crisol de la sociedad mestiza de la que venimos. Españoles de dos mundos, pero con una visión idéntica. Ese es un legado que España tiene el deber de hacer valer frente a la piratería del patrimonio. Tiene el valor del ejemplo.





LA REINA SOFÍA VISITA LAS RUINAS DE LA CULTURA TIWANAKU EN BOLIVIA
                                                                                             
Agencia AFP de Francia (www.google.com/hostednews/afp)

La reina Sofía de España realizó el miércoles un recorrido por el centro ceremonial de Tiwanaku, antigua cultura preincaica que se extendió por Bolivia, Chile y Perú, en la tercera jornada de una visita oficial de cinco días al país, verificó la AFP.
Doña Sofía recorrió el centro ceremonial de Tiwanaku, a 70 kilometros de la Paz y 4.000 metros de altitud, donde se encuentran importantes construcciones líticas como Kalasasaya, la pirámide de Akapana, el templete de Puma Punku y la afamada Puerta del Sol, trabajada en una sola pieza de piedra andesita.
Acompañada por el ministro boliviano de Culturas, Pablo Groux, la reina compartió, más tarde, un almuerzo con las autoridades de Tiwanaku, un poblado ubicado en una impresionante explanada del altiplano.
La reina Sofía, ataviada con un poncho de lana de alpaca, un auquénido andino, también participó de un ritual aymara con la quema de una 'mesa' o 'wajta', compuesta de raíces, dulces y frutas como símbolo de agradecimiento a los dioses andinos.
Previamente, la soberana fue declarada huésped ilustre de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, donde recorrió las instalaciones de la escuela pública España, donde los niños le brindaron un caluroso recibimiento.
Además, un grupo de mujeres aymaras le rociaron la cabeza con mixturas de color (papel picado) y le rodearon el cuello con una colorida guirnalda de flores, rompiendo todo protocolo.
Ésta es la quinta vez que la reina visita Bolivia y en uno de sus viajes, en la década de los noventa, aceptó apadrinar la boda de una indígena quechua, promesa que cumplió representada por el embajador español de entonces.
El martes, doña Sofía asistió, acompañada del presidente de Bolivia, Evo Morales, a la firma de un memorando para estudiar la restitución al país sudamericano de parte de un tesoro compuesto por monedas de oro y plata descubierto en un galeón español hundido en el siglo XIX.
El memorando se compromete "a trabajar proactivamente en la reposición de parte de este hallazgo histórico" y significa "un poco de recompensa por aquella riqueza que ha trasladado convivir a otras latitudes y ha dejado postergación y pobreza a las faldas de la montaña de plata" de Potosí, señaló el ministro Groux.
La reina y su comitiva tienen previsto visitar este jueves y el viernes las misiones de Chiquitos, reducciones jesuíticas en el este del país, así como la ciudad de Santa Cruz, motor del desarrollo económico de Bolivia.





LA REINA SOFÍA Y EL GOBERNADOR DE SANTA CRUZ ANALIZAN LA COOPERACIÓN ESPAÑOLA
                                                           
Agencia EFE de España (www.google.com/hostednews/epa/article)

La reina Sofía de España se reunirá hoy con el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, con quien tratará sobre los proyectos impulsados por la cooperación española en este departamento boliviano, al que dedicará los dos últimos días de su visita a este país andino.
La reina, que llegó anoche a Santa Cruz procedente de La Paz, se desplazará a continuación hasta San José de Chiquitos para conocer los trabajos de rehabilitación del santuario jesuita, que han recibido financiación española, y visitar la Escuela Taller de la Chiquitanía, un centro de formación técnica promovido por España.
La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) contribuye desde 2001 al proyecto de rehabilitación del conjunto misional de San José de Chiquitos en el marco del denominado Plan Misiones, que pretende en última instancia convertir la región de la Chiquitanía en una opción atractiva de turismo cultural, religioso y medioambiental.
En San José, las obras han permitido la restauración del edificio conocido como "la bóveda", donde se han descubierto importantes pinturas murales, así como de la fachada, el patio, la capilla mortuoria y distintas partes de la iglesia, la mejor ornamentada de todo Chiquitos.
Mañana, última jornada de este viaje a Bolivia, la reina permanecerá en la ciudad de Santa Cruz, donde acudirá al Centro de Formación Ocupacional de jóvenes discapacitados, gestionado por los franciscanos, que recibe ayuda española, y presidirá la inauguración de un proyecto de potabilización y alcantarillado financiado por el Fondo Español de Cooperación para Agua y Saneamiento.





4,7%ha crecido Bolivia en los últimos siete años.

BOLIVIA INICIA ROAD SHOW PARA EMITIR PRIMER BONO EN 90 AÑOS

El Diario Financiero de Chile (www.df.cl)
                                                    
Bolivia evaluará esta semana el apetito del mercado con su primer bono soberano internacional en 90 años, en un intento por convencer a los inversionistas sobre su potencial de crecimiento, además de intentar disipar la imagen de hostilidad del país al capital extranjero.
Funcionarios del gobierno altiplánico viajarán a Suiza, Los Angeles, Lima y Boston esta semana en una gira promocional, relanzando un proceso que estuvo en pausa tras el anuncio realizado inicialmente en marzo y en el que Goldman Sachs y Bank of America Merrill Lynch fueron convocados para evaluar el ambiente para una venta de bonos por US$ 500 millones.
“Consideramos que este es el mejor momento para ponernos en el mapa financiero”, dijo Luis Arce, ministro de Hacienda boliviano, durante la reciente reunión del Fondo Monetario Internacional en Tokio.
“Antes, nadie quería darnos crédito, pero las cosas han cambiado. Ahora tenemos solvencia y fundamentos atractivos para los inversores internacionales”, agregó.
La economía de Bolivia ha crecido a un ritmo promedio de 4,7% durante los últimos siete años gracias a la minería y al precio de las materias primas.





MORALES OPINA QUE CRISIS DE EEUU Y EUROPA SE DEBE A QUE YA NO "ROBAN" EN LATINOAMÉRICA

Según el gobernante boliviano, las potencias "tienen mucho miedo", ya que los países subdesarrollados se están levantando
                                                   
El Diario Financiero de Chile (www.df.cl)

El presidente boliviano, Evo Morales, afirmó hoy que la crisis económica de Estados Unidos y de algunos países de Europa se debe a que éstos ya no pueden "robar" ni "saquear" en Latinoamérica como, a su juicio, ocurría antes.
"Hay crisis en EEUU, hay crisis en algunos países de Europa. A qué conclusión yo llego: como ya no nos están robando, no nos están saqueando, entonces hay crisis en los países capitalistas o europeos y nosotros estamos levantándonos", sostuvo Morales en un discurso pronunciado en un acto en la región sureña de Chuquisaca.
Según el gobernante, "las potencias nunca van a querer que los países pequeños se levanten" porque, en su criterio, "tienen mucho miedo", pero pese a ello, "algunos países de Latinoamérica, incluido Bolivia" han comenzado a liberarse.
"Desde la Colonia, la república, solo robando, robando a Latinoamérica (EEUU y los países europeos) eran potencias. Ahora que no pueden robar ya tienen crisis económica, crisis financiera", agregó el mandatario.
Agregó que en España "el pueblo está pidiendo asamblea constituyente" y bromeó con que enviará al actual gobernador de Chuquisaca, el oficialista Esteban Urquizo, que participó en la redacción de la Constitución boliviana promulgada en 2009, "a que enseñe cómo hacer una Constituyente en España".
Resaltó que costó "una dura lucha garantizar la nueva Constitución", pero que gracias a ella, "nunca más los gobiernos que vengan podrán privatizar los servicios básicos" ni "entregar" los recursos naturales de Bolivia "a las trasnacionales".
Morales destacó, por otra parte, que la reina Sofía de España, que visita Bolivia para repasar los programas financiados por la cooperación española, le prometió que se mantendrá la ayuda para estos proyectos, pese a los "problemas sociales y económicos" por los que atraviesa su país.





AUTORIDADES DE BOLIVIA EXIGEN QUE WALDO MORA SE RETRACTE DE SUS DECLARACIONES

El candidato a alcalde PRI por Santiago afirmó que La Paz quiere una salida al mar "para exportar droga", lo que causó la molestia de los parlamentarios y ministros del país vecino.
                                                
La Tercera de Chile (www.latercera.com)
                                                                
Autoridades bolivianas pidieron el miércoles a Waldo Mora, candidato a la alcaldí­a de Santiago por el PRI, que se retracte de su declaración de que Bolivia busca su reivindicación marí­tima para transportar droga.
"Vamos a pedir desde la Cámara de Diputados la retractación de ese candidato a la alcaldí­a, o si no, vamos a pedir que se inicien los procesos penales, porque eso ya significa una acusación por referencia a narcotráfico y eso no se puede dar en ninguna parte del paí­s, ni del mundo", dijo a los periodistas la presidenta de la Cámara baja, Rebeca Delgado.
Mora dijo en un debate con sus adversarios transmitido por CNN Chile que "Bolivia busca reivindicaciones marí­timas hoy dí­a solamente para sacar drogas".
"No estoy de acuerdo con negociar con Bolivia soberaní­a porque tienen los puertos de Arica, Iquique y Antofagasta, no pagan ningún tipo de impuesto, tienen todos los privilegios habidos y por haber", agregó.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, sugirió que la Cancillerí­a haga una representación para que se esclarezcan las declaraciones de Mora.
"(Mora) es un ignorante, porque pienso que es eso, es una persona que no está informada, ignora que es Bolivia, ignora cuáles son sus potenciales y sus dinámicas económicas, ignora que la población boliviana es gente honesta, trabajadora y hay que tomarlo como de quien viene", añadió.
Bolivia demanda una salida al mar soberana, que perdió en la guerra del Pací­fico entre 1879 y 1883.

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