lunes, 2 de julio de 2012

BOLIVIA, ECUADOR, GUYANA Y SURINAM, EN LA FILA PARA ENTRAR AL MERCOSUR


Así como la foto del viernes en Mendoza mostró a un Mercosur rengo -con Cristina de Kirchner, Dilma Rousseff y Pepe Mujica, pero sin los presidentes de Paraguay (suspendido) ni de Venezuela (convaleciente)- operadores brasileños, argentinos y algún otro teñido de bolivarianismo anti «pitiyanqui» buscan concretar, en un futuro cercano, la foto de un Mercosur con cuatro miembros plenos más, que se agregarían a los cinco ya existentes. Con la puerta abierta que dejó el ingreso de Venezuela, los detalles de ese armado se discutieron entre los equipos que acompañaron a los presidentes al cónclave de Mendoza.
¿Un Mercosur ampliado? Además de los actuales Argentina, Brasil, Uruguay, la recién incorporada Venezuela y la temporalmente suspendida Paraguay, ya se negocia la admisión de Ecuador, Bolivia, Guyana y Surinam al bloque. Una foto muy semejante a la de la Unasur, que tiene doce integrantes (por ahora con una foto de once, por la suspensión temporaria de Paraguay).
Sin embargo, la «instantánea» del Mercosur ampliado busca excluir expresamente a Chile, Perú y Colombia. Es que esos tres países acaban de firmar, a principios de junio, junto con México, un acuerdo marco para la Alianza del Pacífico, cuyo teleobjetivo comercial está puesto en los mercados asiáticos.
Quien mejor explica los motivos para la expansión «selectiva» del Mercosur es el brasileño Samuel Pinheiro Guimaraes, alto representante de ese bloque hasta el jueves, cuando renunció al cargo alegando «razones políticas», y que en Brasilia se encargaron de traducir en «fue por falta de presupuesto». No obstante, antes de dimitir, llegó a elevar a los presidentes reunidos en Mendoza las 15 páginas de su proyecto de «Mercosur x 9». Según Pinheiro Guimaraes, es imperativo crear un bloque económico de toda América del Sur. El brasileño descarta el molde de Unasur, ya que en ese club de doce países hay tres que «han adoptado estrategias liberales de inserción en la economía internacional, que dificultan la construcción de políticas regionales de promoción y desarrollo». Son ellos, justamente, Chile, Perú y Colombia. Actualmente son esos tres «descastables», junto a dos «admitibles» (Bolivia y Ecuador), los cinco países asociados al Mercosur.
Datos
Dejando de lado el basamento político-ideológico esgrimido por Guimaraes -que fue vicecanciller y también ministro de Asuntos Estratégicos con Luiz Inácio Lula da Silva, y de la línea de los «barbudos» de izquierda en Itamaraty-, hay datos fácticos que explican por qué México, Bogotá, Lima y Santiago, unidos, miran al Pacífico (y dan -según alegan en el más rancio «suramericanismo»- la espalda a la región). Básico: en 2011, los cuatro de la Alianza del Pacífico exportaron por 525.000 millones de dólares, el equivalente al 55 por ciento de las exportaciones latinoamericanas. Hay más: las tres economías sudamericanas están ranqueadas con investment grade; y todas tienen tratados de libre comercio con Estados Unidos (México en el NAFTA con Canadá).
Es, justamente en esa relación comercial con Washington donde, para Pinheiro Guimaraes y los fanáticos del «suramericanismo», el diablo mete la cola. «El proyecto de EE.UU. para América del Sur no es el Mercosur sino los «mini-ALCAS» bilaterales, como los de la Alianza del Pacífico», dijo hace dos días en una entrevista con Folha de Sao Paulo. Si a ese comentario le agregamos los de Federico Franco, reemplazante de Fernando Lugo en la presidencia paraguaya, de que su Gobierno «contemplaría firmar un TLC con Estados Unidos», no hay que echarle demasiada agua para ver más claro.
En cambio, la visión de José Mujica, presidente de Uruguay, es más flexible y viene sin anteojera política alguna. «Estoy seguro de que tres o cuatro países van a pedir el ingreso al Mercosur», dijo apenas terminó la reunión de Mendoza. Señaló que con la incorporación de Venezuela el bloque «salió del corral de ramas que estaba viviendo hace tiempo; esto es bueno porque diversifica nuestros mercados», para agregar que el bloque «está dispuesto a negociar con países que tienen acuerdos de libre comercio». Y puso como ejemplo a Colombia, con un TLC firmado con Estados Unidos.
Pero no así de «naïves» y relajadas habrían sido, durante la cumbre, las negociaciones por el tema Paraguay. Según comentaron a este diario fuentes involucradas en las conversaciones durante la doble cumbre de Mercosur y Unasur en Mendoza, fueron las presidentas Cristina de Kirchner y Dilma Rousseff quienes llevaron, a puertas cerradas, la batuta de las mismas.
Respuesta
De acuerdo con las fuentes, una vez resuelta la suspensión de Paraguay en el Mercosur, las mandatarias habrían querido reforzar la apuesta y dar por un hecho la expulsión de ese país de la Unasur. Fue allí cuando Sebastián Piñera alzó (y parece que bastante fuerte) la única voz en contrario. Piñera las habría parado en seco y dicho que no podían imponer lo decidido entre ellas para Mercosur a toda la Unasur, recordó una de las fuentes. Mientras, el peruano Ollanta Humala asentía con la cabeza, pero no atinaba a alinearse verbalmente con la posición del chileno. Por su parte, ni el canciller venezolano Nicolás Maduro ni Rafael Correa, ni menos aun Evo Morales habrían querido meter baza en la discusión.
Según dejaron trascender a Ámbito Financiero, la discusión intra-Unasur decantó en la aprobación de una medida «de consenso» para las partes: la posibilidad de que pueda revocarse la suspensión de Paraguay en la Unasur antes de las elecciones de abril. Un Grupo de Alto Nivel, cuya constitución seguramente provoque otra pelea, será el encargado de dar o no ese «waiver».
Mientras tanto, ayer la cancillería paraguaya amenazó con cortarse sola y dejar «per se» la Unasur. Otra grieta más en el realineamiento de posiciones sudamericanas, resquebrajadas a partir de la crisis por Lugo en Asunción. (AMBITO FINANCIERO DE ARGENTINA)





LA COCA DE LA DISCORDIA EN BOLIVIA

El país tiene 31.000 hectáreas de producción y para abastecer los usos legales bastan 12.000
El Gobierno tiene pendiente desde 2008 completar un estudio sobre la realidad de la coca
                                                                            
EL País de España (www.internacional.elpais.com/internacional)

La coca sigue siendo la manzana de la discordia entre los Gobiernos de Bolivia y Estados Unidos. La discrepancia sobre los usos tradicionales de la mítica planta en el país andino no es nueva, pero con el presidente Evo Morales el desacuerdo es de mayor calado. Dentro de tres meses concluirá la presencia en Bolivia de la agencia estadounidense de cooperación internacional (USAID) en programas de cultivos alternativos a la coca. Desde su llegada al Gobierno en 2006, Morales ha expulsado del país al embajador y a la DEA (agencia antidrogas de EEUU), ha cerrado la base militar de Chimoré y acaba de anunciar su retirada del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR). Como contrapunto, el presidente boliviano firmó la semana pasada en La Paz un acuerdo con su homólogo iraní, Mahmud Ahmadinejad, en materia de lucha antidrogas.
“La hoja de coca en su estado natural es un producto con muchas cualidades nutritivas y medicinales. El productor de coca no es narcotraficante, ni el consumidor de hoja de coca es narcodependiente”, insistía el primer presidente indígena de Bolivia en una entrevista reciente a EL PAÍS. La forma más antigua de consumir hojas de coca es masticándolas (akullico), aunque tiene otros usos medicinales, rituales y sociales. Al consumo tradicional hay que añadir otras fuentes de demanda legal como la industria de infusiones, la exportación para uso farmacéutico y la producción de extracto para la Coca Cola.
Es una obviedad que la coca no es cocaína, pese a ser ingrediente esencial para la elaboración de la droga. Pero Estados Unidos, que es el mayor mercado mundial de consumidores de cocaína, rehuye esta distinción y mantiene una firme posición contra los cultivos del arbusto milenario. USAID ha invertido 150 millones de dólares desde 2005 en el Programa de Desarrollo Alternativo Integral en Los Yungas (al norte de La Paz) y Chapare (Bolivia central), las dos regiones de producción de hoja de coca. Los patrocinadores del programa exhiben orgullosos los resultados: los territorios de Palos Blancos y Alto Beni (en Los Yungas) se han convertido en zonas libres de hoja de coca, donde ahora se produce cacao, café, plátano y palmito, entre otros cultivos, destinados esencialmente a la exportación.
El programa de desarrollo alternativo ha mejorado las infraestructuras, como la red escolar y la canalización de agua potable. En 2005, la pobreza rondaba el 70%, según el índice NBI (Necesidades Básicas Insatisfechas) de la CEPAL. Hoy es del 52%. Aparentemente, se ha cumplido con creces el objetivo del 60% de reducir la pobreza. Por lo tanto, el programa llegará a su fin el 30 de septiembre próximo, por decisión del Congreso de Estados Unidos, explica un antiguo funcionario boliviano.
Hasta aquí la versión oficial, de la que nadie en las oficinas de USAID en La Paz ni en la Embajada estadounidense quiere hacer algún comentario. La realidad es más compleja. Según estimaciones oficiales, para abastecer las necesidades de consumo local y legal de hoja de coca se precisan unas 12.000 hectáreas de cultivo. La agencia antidrogas de la ONU calcula que en Bolivia hay actualmente unas 31.000 hectáreas de cocales, que suponen el 20% del total en América Latina, detrás de Colombia y Perú.
El excedente de casi 20.000 hectáreas se produce sobretodo en el Chapare, ya que la mayor parte de la coca que se consume legalmente en Bolivia procede de Los Yungas. En este escenario no es descabellado deducir que la coca del Chapare y una parte de Yungas acaba en manos del narcotráfico para la producción de clorhidrato de cocaína en laboratorios ilegales.
Falta información precisa y actualizada de cuánta coca es necesaria para satisfacer la demanda del mercado interno, y de cuánta se desvía para la producción de cocaína. Las dudas desaparecerán cuando el Gobierno difunda el Estudio Integral de la Hoja de Coca, que puso en marcha en 2008, con financiación de la Unión Europea (un millón de euros), y que todavía no ha visto la luz. Según el viceministro de Exteriores, Hugo Fernández, dicho estudio “contribuirá efectivamente a la reelaboración de las políticas públicas, dirigidas tanto a la revalorización de la hoja de coca, como a la lucha contra el narcotráfico”. El trabajo incluye una encuesta nacional sobre uso y consumo de hoja de coca.
La Ley 1008, del Régimen de la Coca y Sustancias Controladas, aprobada en 1988 bajo el Gobierno de Víctor Paz Estenssoro, sigue siendo la herramienta principal de la lucha antidrogas. Las penas van desde un año de prisión por cultivo ilegal hasta 30 años, si se encuentra a una persona culpable de haber vendido drogas a alguien que se intoxica hasta la muerte. Más antigua es la Convención de 1961 de Naciones Unidas sobre estupefacientes, que incluye la hoja de coca en la Lista 1 de sustancias prohibidas. El Gobierno de Evo Morales presentó una propuesta para enmendar el artículo 49, en lo referente a la masticación de la hoja de coca. La propuesta fue rechazada y Bolivia tomó la decisión, sin precedentes, de denunciar dicha Convención y adherirse a la misma con una reserva.
Sobre el terreno la lucha contra los narcos sigue sin cuartel. El año pasado la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico (FELC) destruyó “más de 5.000 fábricas de cocaína, 6.500 pozas de maceración y 25 laboratorios de cristalización”, según el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Felipe Cáceres.
En su época de líder de los campesinos cocaleros, Evo Morales ya irritaba al embajador de Estados Unidos. Uno de ellos, Manuel Rocha, no tuvo empacho en declarar que una hipotética victoria electoral de Morales –“un agitador de la coca ilegal”--, tendría consecuencias desastrosas para las relaciones entre Washington y La Paz. Hace un siglo, el jefe de la diplomacia estadounidense en el país andino no tuvo mejor ocurrencia que proponer goma de mascar para todos los bolivianos, en vez de hoja de coca.





CONFLICTOS LIMÍTROFES LATENTES EN AMÉRICA LATINA

El Comercial de Argentina (www.elcomercial.com.ar)
                                                  
El sueño de la patria grande de Simón Bolívar quedó ya muy lejos. La mayoría de los países latinoamericanos transitan el bicentenario de sus independencias con sus fronteras más o menos consolidadas luego de un proceso jalonado de guerras y sangrientos enfrentamientos. Y aunque en cada foro los líderes regionales reiteran la necesidad de integración, los conflictos limítrofes persisten.
Algunos se han visto reactivados recientemente por gobiernos que saben que ese tipo de banderas alimentan una galvanización nacional que puede servir a fines electorales o a modo de distracción de problemas acuciantes. Otros son heridas de las que todavía se exploran formas de cicatrización. En medio de esto se resucitan peligrosas rivalidades, que suelen en realidad perseguir objetivos económicos. Veamos la lista.
SUDAMÉRICA
Chile-Bolivia
La Paz le reclama a Santiago una salida soberana al mar que perdió tras la Guerra del Pacífico (de la que también participó Perú) en 1879. El tratado de paz y amistad firmado en 1904 puso fin al conflicto con consecuencias que se mantienen hasta estos días: Bolivia entregó sus 400 kilómetros de costa (hoy provincia de Antofagasta), mientras que Chile se comprometió a conceder el libre tránsito de mercaderías desde y hacia su vecino (sin impuestos ni restricciones) a través de su territorio.
Esa solución nunca satisfizo a Bolivia, que desde 1978 decidió romper relaciones diplomáticas con Chile. Un nuevo horizonte de negociaciones se abrió con la llegada al poder de Evo Morales y Michelle Bachelet. Aunque el diálogo parecía tener un rumbo sereno, durante la gestión de Sebastián Piñera volvió a tensarse.
Actualmente, ambos gobiernos protagonizan duros cruces de declaraciones en torno al diferendo. A las amenazas bolivianas de acudir a tribunales internacionales por considerar “muerto” el pacto suscrito a comienzos del siglo XX, Chile ha respondido con un endurecimiento de su postura.
Chile-Perú
En 2008, Lima demandó a Santiago por 37.000 km2 de una zona de 90 mil km2 de mar territorial en su frontera (zona conocida en Perú como Triángulo Exterior), alegando, entre otras razones, la inexistencia de un tratado de límites, algo que Chile niega.
La disputa está en manos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en La Haya. El entonces presidente peruano e impulsor de esa medida, Alan García, siempre se mostró optimista en cuanto al resultado. Consideró que los límites marítimos firmados ese mismo año con Ecuador eran una prueba suficiente de que los tratados firmados con Chile en 1952 y 1954 carecen de validez, ya que -a los ojos de Perú- sólo regulan el ámbito de la pesca, pero no atienen a la soberanía territorial.
Aunque las relaciones entre Piñera y Ollanta Humala han sido cordiales, el gobernante peruano sigue con atención la resolución del tribunal. En tanto, Chile -como con Bolivia- se muestra reacio a negociar.
Colombia-Venezuela
Las relaciones entre estos dos pueblos hermanos se han visto más alteradas en los últimos años por las diferencias políticas que por problemas limítrofes. De hecho, las negociaciones sobre el diferendo en torno al Golfo de Venezuela han estado congeladas por décadas sin que ningún gobierno posterior a 1990 exprese una voluntad seria de retomar el tema.
El conflicto en torno a ese golfo se remonta a 1939, momento en el que se discutían los alcances de la frontera terrestre. Lo que está en discusión es un conjunto de islas rocosas, deshabitadas y sin vegetación. El archipiélago Los Monjes (Venezuela) es considerado como la separación imaginaria con el mar Caribe. La importancia del lugar es su posición estratégica y su potencial petrolero.
Guyana-Venezuela
Ambos países mantienen un diferendo desde hace más de un siglo por el área conocida como Guayana Esequiba. Esa zona, de unos 160.000 km2, constituye unos dos tercios del territorio de la ex colonia británica y es rica en recursos minerales y bosques.
Venezuela siempre ha reclamado esa zona como propia, pero un laudo arbitral de 1899 resolvió que ese territorio era parte de su país vecino. Caracas reactivó su reclamo en 1962 y, cuatro años más tarde, se firmó el Acuerdo de Ginebra en el los dos países se comprometieron a resolver el diferendo de manera amistosa.
Tras un pedido de Guyana, la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de las Naciones Unidas analiza el asunto. Está previsto que se pronuncie en 2012, aunque su resolución no tendrá un efecto vinculante.
Guyana-Surinam
Estas dos ex colonias pelean por el control de una pequeña zona conformada por los ríos Boven-Corantijn (en Guyana: New River) y el Koetari, en la cabecera del río Coeroeni.
La disputa sobre el área -conocida en Guyana como New River Triangle (triángulo del río nuevo), y región de Tigri en Surinam- motivó a comienzos de siglo una amenaza de Surinam de una invasión de ese territorio de unos 15.600 km2, cuya soberanía pertenece a Guyana, según confirmó la ONU.
CENTROAMÉRICA Y EL CARIBE
Belice-Guatemala
Pasaron más de 150 años desde que se inició este diferendo y aún no hay signos de que se resolverá a corto plazo. Ejemplo claro de la herencia colonial en las Américas, este conflicto empezó entre británicos y españoles, y recién comenzó a dirimirse de modo bilateral entre Guatemala y Belice en 1981, cuando el segundo consiguió su independencia.
Cuatro años más tarde, Guatemala desconoció los tratados firmados con Gran Bretaña que delimitaban las fronteras y desde entonces reclama una porción de más de 11.000 km2 del territorio de Belice, así como centenares de islas e islotes. Las autoridades de ambos países pactaron que el 6 de octubre de 2013 se realice un referéndum simultáneo para que las poblaciones de expresen a favor o en contra de que la disputa sea sometida a una votación en la CIJ. Hay dos escenarios posibles: en caso de que la moción sea aprobada en los dos países, se procederá a llevar el litigio al tribunal (la resolución demoraría al menos cuatro años); si en uno de ellos se impone el “no”, entonces se deberá buscar otras formas de arbitraje.
Costa Rica-Nicaragua
El litigio comenzó en el último trimestre de 2010 y tuvo una primera respuesta en marzo de este año, cuando la corte de La Haya estableció medidas provisionales por el conflicto y desestimó su capacidad para pronunciarse por el reclamo de soberanía.
El cruce se produjo cuando el gobierno de Laura Chinchilla denunció que tropas nicaragüenses habían violado la soberanía costarricense al ingresar ilegalmente en territorio nacional. Daniel Ortega desestimó las acusaciones al entender que la zona inspeccionada por su ejército, la isla de Portillos, pertenece a Nicaragua, lo que abrió la disputa.
Si bien el Tribunal dictaminó una serie de medidas -como la prohibición del envío de personal civil o militar al lugar-, Managua se mostró disconforme con el fallo.
El conflicto sigue su curso judicial.
Tras la presentación de los alegatos escritos de San José ante la CIJ, Managua prepara su defensa para agosto de 2012. La resolución se conocería a mediados de 2013. Mientras tanto, la relación entre ambos gobiernos es tensa.
Nicaragua-Colombia
El conflicto se centra en la disputa por un archipiélago formado por las islas San Andrés, Providencia y Santa Catalina y de un grupo de islotes que se encuentran en un área de 50 mil kilómetros cuadrados del mar Caribe.
Colombia ejerce la soberanía basándose en un tratado firmado con Nicaragua en 1928, cuando ese país estaba ocupado por los Estados Unidos. Durante años, gobiernos nicaragüenses criticaron ese pacto hasta que, en 2001, fue presentada formalmente la demanda ante la Justicia internacional.





BOLIVIA, LA TIERRA QUE EL CHE FERTILIZÓ CON SU SANGRE

Cuba Debate (www.cubadebate.cu/opinion)

La ignorancia y la continua difamación impuesta por los grandes poderes mediáticos limitan a millones de personas en el mundo que conozcan a Bolivia, la tierra que el Che fertilizó con su sangre, y un país que te abraza desde el mismo momento que lo pisas, entre otras muchas cosas, porque está más cerca del cielo que de la tierra.
Su abrupta pero bella naturaleza, su cultura indígena milenaria y su gente modesta y humilde, hacen que esta nación sudamericana te cautive desde el mismo instante que la conoces, a pesar de que en su ciudad principal, La Paz, y también en otras ubicadas a miles de metros sobre el nivel del mar, escaseé el oxigeno, no obstante sobra mucha historia que te hace respirar con intensidad.
Quizás fue ese contraste, y el espíritu guerrero anticolonialista de sus habitantes los que cautivaron al Comandante Ernesto Guevara a iniciar en Bolivia una nueva Revolución latinoamericana, cuyas ideas se perciben cotidianamente en este país, y además en este continente, en el siglo XXI, 45 años después del asesinato del Che.
De todo ha hecho Estados Unidos y sus regímenes impuestos en esta nación sudamericana para borrar los ideales del Guerrillero Heroico, pero San Ernesto, como le dicen aquí, está presente en todos los rincones, como un fantasma fatídico para el imperio más poderoso de la historia del universo, que pretende a toda costa mantener a América Latina bajo su dominio y como su traspatio.
Varios “ángeles terrenales” de San Ernesto, como los dignatarios Evo Morales (Bolivia), Hugo Chávez (Venezuela), Rafael Correa (Ecuador), Daniel Ortega (Nicaragua), y las presidentas de Argentina, Cristina Fernández, y de Brasil, Dilma Rousseff, entre otros, por no mencionar a Fidel Castro y al actual mandatario cubano, Raúl Castro, en el Caribe, tienen a Washington con constantes pesadillas y una paranoia incurable.
Es precisamente esa la causa de los planes desesperados que Estados Unidos emprende en Latinoamérica para desestabilizarla, utilizando desgastadas y viejas estrategias como los golpes de Estado, ahora algo modernizados, si le queremos llamar de algún modo, como el que recientemente dio al traste con el gobierno de Fernando Lugo, en Paraguay, y el que frustradamente se pretendió materializar hace pocos días en Bolivia contra Evo.
Iluso Washington si persiste en que conseguirá materializar repetidas intentonas golpistas en Latinoamérica, y romper la solida unidad que actualmente caracteriza esta región, cansada de los constantes saqueos y los abusos de las sucesivas administraciones norteamericanas, y que hoy apuesta por un futuro de integración, sin la presencia de quienes siempre han deseado ser sus verdugos.
San Ernesto, desde Bolivia, sigue dando aliento, y con más intensidad que nunca, a sus “ángeles terrenales”, que día a día hacen realidad los anhelos del Che de que el continente en que nació y vive todavía en el pensamiento de millones de personas sea independiente definitivamente de Washington.





EN PARAGUAY, VENEZUELA, ECUADOR Y BOLIVIA SE MANIFIESTA EL ‘NEOGOLPISMO’, SEGÚN EX ALTO REPRESENTANTE DEL MERCOSUR

El Comercio de Ecuador (www.elcomercio.com/politica)

El renunciante Alto Representante general del Mercosur, el brasileño Samuel Pinheiro Guimaraes, denunció la existencia de un “neogolpismo” en América del Sur que se manifiesta en Paraguay, Venezuela, Ecuador y Bolivia. “El neogolpismo reconoce que los gobiernos fueron electos democráticamente, pero argumenta que ellos no gobiernan democráticamente. Crea imágenes de esos gobiernos como dictaduras y genera un clima que justifique un golpe de Estado, inclusive por medios no militares”, dijo Pinheiro. En una entrevista con la revista Carta Capital, el ex vicecanciller del gobierno de Luiz Lula da Silva que renunció al cargo del Mercosur el miércoles en medio de la crisis paraguaya por la destitución del presidente Fernando Lugo, se explayó sobre el “neogolpismo”. “Existe en Sudamérica algo que puede ser llamado como neogolpismo, que tuvo manifestación en Paraguay, Venezuela, Ecuador y Bolivia”, explicó, y afirmó que los gobiernos que emprenden cambios sociales son llamados “populistas”. Según Pinheiro, la situación paraguaya explica que las fuerzas tradicionales se imponen sobre la voluntad electiva. “En Sudamérica candidatos a cargos mayoritarios son elegidos con votos de las mayorías, que son pobres. Por otro lado, en los poderes legislativos las fuerzas hegemónicas se hacen representar”, comparó. En ese sentido, puso como ejemplo la distribución en el Congreso de Brasil, donde el bloque ruralista que representa a los terratenientes tiene gran presencia y los movimientos de trabajadores rurales apenas “media docena”. “Los trabajadores rurales son mayoría de la población en el campo pero no están representados en el Congreso. Eso ocurre en la mayoría de los países”, dijo Pinheiro, uno de los estrategas teóricos de la política exterior inaugurada por el gobierno de Lula da Silva en el 2003.





DETRÁS DEL GOLPE: NUEVAS BASES EN PARAGUAY

El más poderoso complejo mediático de la derecha en Paraguay y clave en la destitución del presidente Lugo, el diputado López Chávez, confirmó que dialogó con jefes militares estadounidenses sobre la posibilidad de instalar las bases.
                                                                       
Telesur de Venezuela (www.telesurtv.net/articulos)

Mientras se realizaba el juicio político “express” contra el presidente democráticamente elegido en Paraguay, Fernando Lugo, el pasado 22 de junio, considerado “ilegal” por los países vecinos, diputados paraguayos se reunían con militares de Estados Unidos, para negociar la instalación de una base militar en el Chaco, un territorio extenso y despoblado en ese país.
El diputado José López Chávez que respondía al grupo disidente del Partido Colorado, la UNACE, encabezado por el golpista general Lino Oviedo, con el cuál tiene algunas diferencias, y presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara Baja de ese país, confirmó su “esperanza” de que Estados Unidos, instale Bases militares en el Chaco, según fuentes del ABC Color ( www.abc color.com. py).
De acuerdo con este medio, el más poderoso complejo mediático de la derecha en Paraguay y clave en la destitución del presidente Lugo, el diputado López Chávez -un hombre acusado de conductas mafiosas- confirmó que dialogó con jefes militares estadounidenses sobre la posibilidad de instalar las bases, aunque el tema está siendo analizado por el Pentágono.
Hablando con una radio paraguaya (789 AM) el legislador argumentó que “es necesario” instalar estas bases ya que, según su apreciación, Bolivia “constituye una amenaza para Paraguay debido a la carrera armementista que desarrolla”. Además argumenta que su país necesita mejorar su seguridad en esas zonas despobladas.
El posible acuerdo bilateral además llevaría al lugar “ayuda humanitaria” de contingentes de tropas estadunidenses” para la población local. Como se sabe la “acción Cívica ” y “ayuda humanitaria”, que ya han realizado tropas de Estados Unidos en Paraguay, a las que se dio inmunidad diplomática en mayo de 2005, es un esquema de contrainsurgencia, de espionaje y control poblacional y territorial.
De acuerdo a las fuentes, esta propuesta tomó estado público el pasado 23 de junio “luego de un encuentro entre referentes de la Comisión de Defensa de diputados con un grupo de generales de Estados Unidos que llegó al país para dialogar sobre eventuales acuerdos de cooperación.”
Esta precisamente podría ser una de las causas de la rapidez con que se sacó a Lugo del medio por los compromisos con el Mercado Común del Sur y la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) lo que no hubiera permitido avanzar en este proceso de bases.
En 2009 Lugo había rechazado, aunque débilmente la posibilidad de maniobras grandes del Comando Sur en Paraguay, aduciendo los compromisos con los países asociados.
Pero desde mayo de 2005 -antes de la llegada de Lugo al gobierno- se permitió el ingreso de tropas de Estados Unidos a ese país, con inmunidad, permiso de libre tránsito y permanencia para sus soldados con vigencia hasta diciembre de 2006 y prorrogable automáticamente como en ese momento publicó el periódico La Jornada.
Fue uno de los golpes más fuertes que Washington descargó sobre el Mercosur. Renunciando a su poder jurisdiccional, ya que las tropas pueden trasegar armamentos, equipos y medicamentos y actuar en cualquier lugar del territorio, sin nuevas autorizaciones en esos momentos, entró el primer contingente de 400 soldados y grupos especiales.
En realidad en Paraguay este tipo de tropas nunca se fueron. Cuando el dictador Alfredo Stroessner fue derrocado por un golpe “entre amigos” en febrero de 1989, se mantuvieron en el poder, militares que habían participado de esa larga dictadura (1954-1989). Paraguay perdió entonces el derecho de investigar los delitos que pudieran cometer las tropas extranjeras y no podrá demandar a Washington ante la Corte Penal Internacional, violando su propia legislación.
En Paraguay informes detallados de analistas militares advirtieron sobre la poderosa infraestructura de Estados Unidos en un país de importancia geoestratégica porque limita con Bolivia, Brasil, Argentina y está con relativa cercanía de otros, donde hay bases estadunidenses.
También los militares del Comando Sur, han marcado el territorio que está sobre el extenso Acuífero guaraní, uno de los más grandes de agua potable del mundo ubicado en la Triple Frontera que tiene Paraguay con Argentina y Brasil.
De acuerdo a los informes militares todos los cuarteles paraguayos cercanos a las fronteras, están preparados como infrastructura para las tropas de Estados Unidos, que incluso han cavado pozos artesanos, para agua potable, supuestamente para campesinos, que en realidad estos no utilizan.
De la misma manera el cuartel Mariscal Estigarribia, situado sólo a 250 Km de Bolivia, tiene una pista de casi tres mil metros de largo, en un país, que tiene escasas Fuerza Aéreas.
Esa pista la construyeron las tropas estadunidenses, e incluso la modernizaron en los últimos años y está diseñada para recibir los aviones Galaxy y otras naves de Estados Unidos portadoras de equipos, armamento en gran escala, como también está preparada la pista de la Base de Palmerola en Honduras . De la misma manera allí pueden ubicarse miles de soldados, si se requiere hacerlo en cualquier momento.
Está señalada como una de las bases -en este caso una poderosa infraestructura- entre las que tiene Estados Unidos en América Latina.
Sin embargo, es evidente que ante la ofensiva que está en marcha sobre los gobiernos de Sudamérica, que posibilitaron un escenario golpista en Bolivia y Paraguay, en los días de junio de este año, así como conatos desestabilizadores en Argentina, necesitan ubicar más tropas en ese lugar estratégico.
La noticia de estos acuerdos hablados entre los corruptos diputados ligados a la pasada dictadura y los generales estadunidensea, no sorprende en estas circunstancias. Y precisamente en un país donde la lucha por las tierras robadas y “malhabidas”, como las caracterizó la Comisión por la Memoria, Verdad y Justicia , el conflicto social es una cuestión permanente.
Para los campesinos recuperar sus tierras es una cuestión de vida o muerte. Especialmente por los ataques de los llamados “brasiguayos” y sus grupos de choque, empresarios sojeros de Brasil, pero como sostiene Martín Alamda defensor de derechos humanos, forman parte de las grandes corporaciones como Monsanto que avanzan sobre el continente.
Detrás de la destitución de Lugo, hay una serie de elementos que deben verse como un golpe estratégico para el proyecto de desestabilización tendiente a golpear a la integración latinoamericana.





DESTITUCIÓN DE LUGO, MANIOBRA POLÍTICA DE ESTADOS UNIDOS

La Vanguardia de México (www.vanguardia.com.mx)
                                                                        
Mientras se realizaba el juicio político exprés contra el presidente democráticamente electo de Paraguay, Fernando Lugo, el pasado 22 de junio, considerado "ilegal" por los países vecinos, diputados paraguayos se reunían con militares de Estados Unidos para negociar la instalación de una base castrense en el Chaco, territorio extenso y despoblado del país sudamericano.
El legislador José López Chávez, quien respondía al grupo disidente del Partido Colorado (la Unace) –encabezado por el general golpista Lino Oviedo, con el cual tiene algunas diferencias– y es presidente de la Comisión de Defensa de la cámara baja, expresó su "esperanza" en que Estados Unidos instale bases militares en el Chaco, según fuentes de ABC Color (www.abccolor.com.py).
De acuerdo con ese medio, el más poderoso complejo mediático de la derecha en Paraguay y clave en la destitución de Lugo, el diputado López Chávez –acusado de conductas mafiosas– confirmó que dialogó con jefes militares estadunidenses sobre la posibilidad de instalar bases, aunque el tema está siendo analizado por el Pentágono
En declaraciones a una radiodifusora paraguaya (789 AM), el legislador argumentó que "es necesario" instalar dichas bases, ya que, según su apreciación, Bolivia "constituye una amenaza para Paraguay", debido a la carrera armamentista que desarrolla. Asimismo alega que su país necesita mejorar su seguridad en las zonas despobladas.
La "ayuda humanitaria"
El posible acuerdo bilateral llevaría "ayuda humanitaria de tropas estadunidenses" para la población local. Como se sabe, la "acción cívica" y la "ayuda humanitaria", que ya han realizado tropas de Estados Unidos en Paraguay, a las que se dio inmunidad diplomática en mayo de 2005, es un esquema de contrainsurgencia, espionaje y control poblacional y territorial.
Según las fuentes, esa propuesta tomó estado público el pasado 23 de junio, "luego de un encuentro entre referentes de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados con un grupo de generales de Estados Unidos, el cual llegó al país para dialogar sobre eventuales acuerdos de cooperación".
Esta podría ser una de las causas de la rapidez con que se sacó a Lugo del gobierno, por los compromisos con el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión de Naciones Sudamericanas, lo que no habría permitido avanzar en el proceso de bases castrenses.
En 2009 Lugo había rechazado, aunque débilmente, la posibilidad de grandes maniobras del Comando Sur en Paraguay, aduciendo los compromisos con naciones asociadas.
Pero desde mayo de 2005 –antes de la llegada de Lugo al gobierno– se permitió el ingreso de tropas estadunidenses a Paraguay con inmunidad, permiso de libre tránsito y permanencia para sus soldados con vigencia hasta diciembre de 2006, prorrogable automáticamente, como entonces publicó este periódico.
Fue uno de los golpes más fuertes que Washington asestó contra el Mercosur, el cual renunció así a su poder jurisdiccional, ya que las tropas pueden trasegar armamento, equipo y medicamentos y actuar en cualquier lugar del territorio, y sin nuevas autorizaciones en esos momentos entraron un contingente de 400 soldados –el primero– y grupos especiales.
En realidad, este tipo de tropas nunca se fueron de Paraguay. Cuando el dictador Alfredo Stroessner fue derrocado por un golpe entre amigos en febrero de 1989 se mantuvieron en el poder militares que habían participado en su larga dictadura (1954-1989).
Paraguay perdió el derecho de investigar los delitos que pudieran cometer las tropas extranjeras y no podrá demandar a Washington ante la Corte Penal Internacional, violando así su legislación.
En Paraguay, informes detallados de analistas militares advirtieron sobre la poderosa infraestructura de Estados Unidos en un país de importancia geoestratégica, porque limita con Bolivia, Brasil, Argentina y está relativamente cerca de otros donde hay bases castrenses estadunidenses.
Los militares del Comando Sur han marcado el territorio que está sobre el extenso acuífero guaraní, uno de los más grandes de agua potable del mundo, ubicado en la triple frontera que tiene Paraguay con Argentina y Brasil.
Según los informes castrenses, todos los cuarteles paraguayos cercanos a las fronteras están preparados como infraestructura para tropas estadunidenses, las cuales incluso han cavado pozos artesianos para agua potable, supuestamente para campesinos, que en realidad éstos no utilizan.
Así, el cuartel Mariscal Estigarribia, situado a sólo 250 kilómetros de Bolivia, tiene una pista de casi 3 mil 800 metros de largo, en un país que tiene escasas fuerzas aéreas.
Ésta fue construida por tropas estadunidenses, las cuales la modernizaron en años recientes y está diseñada para recibir aviones Galaxy y B-52, así como otras aeronaves portadoras de equipo y armamento de gran escala; también está preparada la pista de la base de Palmerola, en Honduras.
De la misma manera, allí pueden ubicarse miles de soldados si se requiere hacerlo en cualquier momento. Está catalogada como una de las bases con infraestructura más poderosa de Estados Unidos en América Latina.  Sin embargo, es evidente que ante la ofensiva en marcha contra los gobiernos de Sudamérica que posibilitaron un escenario golpista en Bolivia y Paraguay, en junio de este año, así como conatos desestabilizadores en Argentina, se necesita ubicar más tropas en ese lugar estratégico.
La noticia de los acuerdos mencionados entre los diputados ligados con la dictadura pasada y los generales estadunidenses no sorprende en estas circunstancias. Y precisamente en un país donde la lucha por las tierras robadas y mal habidas, como las caracterizó la Comisión por la Memoria, la Verdad y la Justicia, el conflicto social es cuestión permanente.
Para los campesinos, recuperar sus tierras es cuestión de vida o muerte. Especialmente por los ataques de los llamados "brasiguayos" y sus grupos de choque, empresarios soyeros de Brasil, pero como sostiene Martín Almada, defensor de los derechos humanos, forman parte de las grandes corporaciones, como Monsanto, que avanzan sobre el continente.
Detrás de la destitución de Lugo hay elementos que deben verse como un ataque estratégico para el proyecto de desestabilización, tendiente a golpear la integración latinoamericana.





BOLIVIA VISITA SALAMANCA PARA CONOCER EXPLOTACIONES Y EMPRESAS GANADERAS
                                                        
La Tribuna de España (www.tribunasalamanca.com)

Las instalaciones del Mercado de Ganado y la Lonja Provincial de Salamanca han recibido la visita de tres estudiantes bolivianos que han visitado otras zonas de España como mUrcia con el objetivo de conocer los avances tencológicos relacionados con la ganadería.
Así lo han confirmado ellos mismos, acompañados por miembros del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl), organismo mediante el cual han realizado esta visita que se prolongará durante una semana, con el fin de visitar y conocer explotaciones y cooperativas lácteas. Entre ellas, también realizarán una visita a la finca de la Diputación como Castroenríquez.
Los tres estudiantes llevan ya más de un mes en España aprendiendo y tomando conocimiento de los avances tecnológicos que se desarrollan en Salamanca y en España. según explicaron los propios estudiantes, en Bolivia el sector ganadero está mucho más atrasado y no se realizan actividades como la de la Lonja Provincial, ya que en los países sudamericanos el trato se realiza entre el productor y el intermediario, que es quien se lleva la mayoría de los beneficios.
El diputado de Agricultura y Ganadería, Jesús María Ortiz, recibió a este grupo de profesionales y departió con ellos sobre el sector al tiempo que explicó el funcionamiento de las instalaciones de la Lonja y el Mercado.





BOLIVIA: INDÍGENAS MANTIENEN SECUESTRADOS A INGENIEROS DE MINERA CANADIENSE

El gobernador del departamento de Potosí, Félix González, dijo que ha enviado a fiscales, legisladores regionales y dirigentes sociales a la zona donde ocurrió el secuestro para dialogar con los indígenas con el fin de que liberen a las dos personas
                                                           
Revista Analítica de Venezuela (www.analitica.com/va/sintesis)

Indígenas bolivianos de la zona andina de Potosí mantienen secuestrados desde hace cuatro días a dos ingenieros de la minera canadiense South American Silver e impiden con bloqueos el acceso al lugar de una comisión de autoridades, informaron hoy fuentes oficiales y de la compañía.
El gobernador del departamento de Potosí, Félix González, dijo a Efe que ha enviado a fiscales, legisladores regionales y dirigentes sociales a la zona donde ocurrió el secuestro para dialogar con los indígenas con el fin de que liberen a las dos personas.
Los indígenas de Potosí tomaron como rehenes el jueves a los ingenieros Fernando Fernández y Agustín Cárdenas para exigir al Gobierno que libere a su dirigente Cancio Rojas, acusado de secuestro y torturas, y para rechazar las operaciones de la firma.
Rojas salió de prisión la noche de ese día, pero sigue bajo arresto domiciliario al ser investigado por agresiones a otros indígenas y el secuestro durante varios días de policías.
González tiene la información preliminar de que los indígenas de Malku Khota, donde opera la empresa, trasladaron a los secuestrados a otra comunidad, pero aguarda el reporte de la comisión.
El gobernador dijo que la zona es "de alto riesgo" y descartó que el presidente boliviano, Evo Morales, de origen aimara como los indígenas de la región, pueda viajar hasta allí, a 350 kilómetros al sur de La Paz, como piden los nativos para escuchar sus demandas.
Más de ochenta policías, periodistas, fiscales y empleados de la firma llegaron al campamento minero de Sacani, a 20 kilómetros de Malku Khota, pero no pueden avanzar más porque los indígenas bloquean las vías y hacen detonar dinamita para amedrentarlos.
Una fuente vinculada con la empresa, que se encuentra en Sacani, dijo a Efe que las autoridades buscan una solución pacífica al conflicto y que un dirigente indígena dijo a los fiscales que los dos ingenieros se encuentran bien. La minera canadiense realiza exploraciones en esa región para evaluar su potencial en plata e indio, que son los minerales mayoritarios, aunque también hay oro en porcentajes reducidos, que los indígenas quieren explotar por su cuenta.





“NUEVOS TIPOS” DE GOLPE DE ESTADO Y SUBVERSIÓN PERMANENTE EN AMÉRICA LATINA
                                                           
Telesur de Venezuela www.telesurtv.net/articulos)

Han transcurrido 13 años desde que en América Latina y el Caribe, por voluntad de los pueblos, se abriera un período de constitución de gobiernos de izquierda y progresistas que, sin la existencia del campo socialista de la Europa del Este como contrapeso pero con la presencia activa y digna de Cuba, representan una condición de posibilidad para construir o al menos alterar el orden destructivo del capital.
Pero esos gobiernos revolucionarios y progresistas, producto de la combinación de las resistencias al neoliberalismo y al colonialismo –antes y después de la fundación de las repúblicas-, se desarrollan en un escenario caracterizado por el permanente asedio, abierto y encubierto, de las fuerzas capitalistas lideradas por el imperio más implacable que la humanidad haya conocido en su historia de miles de años.
No hay día que transcurra para los pueblos y los gobiernos que están protagonizando el tercer momento emancipador de América Latina y el Caribe, sin que cientos de obstáculos aparezcan en su camino: unos, complejos y numerosos por las grandes dificultades de desmontar más de cinco siglos de orden del capital; otros, construidos por la creatividad destructiva del imperio.
Las tareas son bastante grandes y difíciles. La transición se muestra, de esta manera, compleja y larga; no hay día que pase sin que la condición de posibilidad de avanzar hacia la emancipación no esté acompañada de la condición de posibilidad de la reversión de los procesos y la instalación de la contrarrevolución en sus peores formas.
A cada medida revolucionaria o de reforma social progresista que toman los gobiernos de izquierda, la derecha le responde con otra para frenar su materialización. Es la lucha permanente entre la vida y la muerte. Entre la construcción de una sociedad de nuevo tipo o el restablecimiento de los hilos ocultos de la dictadura del capital.
Desde 1999, cuando en Nuestra América se instala el gobierno bolivariano de Hugo Chávez, hasta la victoria de Fernando Lugo en Paraguay en 2008, las formas del asedio contrarrevolucionario han sido bastantes y todas comandadas por la Casa Blanca y la derecha internacional.
Por bastante empleadas que fueron en la década de los 70, cuando las dictaduras de la “seguridad nacional” asesinaron, torturaron e hicieron desaparecer a miles de personas, la táctica de los golpes de estado ha sido de la más utilizada en lo que va del siglo XXI, con la adición no menos importante de mecanismos permanentes de subversión, entendida como la alteración sistemática del nuevo orden que se pretende edificar. Una parte de los medios de comunicación privados juegan un papel importante en el desarrollo de la subversión amplificando los conflictos, tomando algunos elementos de la realidad para construir la realidad que quieren mostrar. Es decir, es la estrategia del desgaste prolongado.
Contra Chávez se desarrollaron dos modalidades de golpe: la patronal y la militar de nuevo tipo. En la primera se hizo uso del predominio de las formas privadas de concentración de la propiedad y la producción para desabastecer la provisión de alimentos y servicios y así generar un ambiente de desconcierto y desesperación de los sectores más amplios de la sociedad. En la segunda se utilizó a una parte de los destacamentos especiales de hombres armados (militares y policías) del estado capitalista para secuestrar al presidente legal y legítimamente constituido por voluntad popular. La segunda modalidad se caracteriza, a diferencia de la experiencia de las décadas de los 60 y 70, en que una fracción de los militares hace el trabajo sucio, pero los civiles asumen la dirección.
Esta segunda modalidad de golpe de estado de “nuevo tipo” ha sido desplegada contra Chávez y Manuel Zelaya en 2002 y 2009 respectivamente. La primera fue derrotada por la rápida reacción popular y por una correlación de fuerzas sociales internas desfavorables a los golpistas. La segunda salió exitosa a pesar de la inmediata reacción internacional liderada por los países del ALBA (que no existía cuando se pretendió liquidar la revolución bolivariana) y debido a la escasa cohesión social interna. Pero en ambos casos, correspondió a los civiles (dirigentes empresariales o políticos) asumir el mando: por no más de 48 horas en el caso de Venezuela (con Pedro Carmona) y por varios meses en Honduras con Roberto Micheleti.
Pero a las dos modalidades empleadas contra Chávez y Zelaya, se añade otra de aparente legalidad: el golpe de estado congresal, aunque una combinada con la participación de militares y otra de sola concurrencia parlamentaria. En el caso del presidente hondureño se emplearon ambas, pues el general Vásquez encabezó el golpe pero la conducción del país fue asumida por el presidente del Congreso Nacional. La variante de la sola participación parlamentaria fue experimentada el pasado viernes (22 de junio) en Paraguay, cuando en menos de 48 horas diputados y senadores abrieron y cerraron, respectivamente, un juicio político en el que el acusado (Fernando Lugo) no tuvo tiempo ni para defenderse. De ahí que fuera calificado como “Golpe parlamentario Express”. Aquí la condena internacional salió de UNASUR, MERCOSUR y el ALBA. La OEA –brazo político de EE.UU.-acompañó el golpe con su silencio.
Pero siempre en la línea de los golpes de estado, la América Latina y el Caribe del siglo XXI ha experimentado una cuarta modalidad: la del golpe cívico-prefectural, por hacer referencia a la combinación de fuerzas sociales conservadoras y autoridades subnacionales. Este es el caso de Bolivia, donde en 2008 el presidente Evo Morales enfrentó una arremetida ultraderechista focalizada en lo que se llamó “la media luna”, integrada por los departamentos orientales de Pando, Beni, Santa Cruz y Tarija. Se trataba de forzar el derrocamiento del presidente y líder indígena por la vía de dividir el país en dos. La ofensiva derechista fue derrotada, pero su ejemplo despertó la simpatía de las clases dominantes asentadas en el estado de Zulia en Venezuela y Guayaquil en Ecuador.
Pues bien, a los cuatro “nuevos tipos” de golpe de estado que la derecha ha puesto en juego en el siglo XXI, hay que sumar otra: la del amotinamiento policial. Todo empieza como protesta reivindicativa y va tomando en horas la forma de proyecto político. Le ha correspondido al presidente ecuatoriano Rafael Correa experimentar en 2010 y su derrota solo fue posible por la actitud valiente del jefe de estado y la rápida reacción de la mayor parte de la ciudadanía, además del rechazo internacional de UNASUR y el ALBA, pero también con el silencio de la OEA.
Si bien habrá que esperar a reunir los hechos y apreciar mejor el desplazamiento de los actores, una situación más o menos parecida se ha registrado ahora en Bolivia. El presidente ecuatoriano Rafael Correa ha advertido que en Bolivia se pretende imitar lo que sucedió en su país. Una protesta policial asentada en una demanda sectorial comprensible ha tomado la forma de un amotinamiento violento y horas después se tradujo, a pesar de la convocatoria del gobierno al diálogo y el ofrecimiento de más que duplicar el salario mínimo, en la toma de instalaciones, el saqueo y quema de documentación, el apedreamiento de dos Ministerios (de Gobierno y Justicia), el uso de capuchas, la advertencia de abrir los recintos penitenciarios y la amenaza de poner fin al mandato del presidente Evo Morales.
La protesta policial se registra, casualidad o no, poco tiempo después que se descubriera el fallido intento de la embajada de Estados Unidos de trasladar armas, sin autorización alguna, del departamento del Beni a Santa Cruz, y del cambio del mando policial que desactivó el operativo estadounidense y en medio de la disputa por el ascenso a generales.
La respuesta del gobierno ha sido “encapsular” el conflicto en lo reivindicativo y solo algunas parcas declaraciones de las autoridades y una reacción de los movimientos sociales a través de los medios de comunicación, principalmente estatales, ha mostrado algunos componentes de lo político. En Bolivia no se ha registrado una alteración estructural del orden constitucional, pero que se construyó un escenario de golpe de estado es innegable.
Más de cinco golpes de estado de “nuevo tipo” desde 2002 –de los que dos han resultado exitosos-, muestran los grandes peligros que acechan a los gobiernos de izquierda y progresistas de América Latina y el Caribe. La transición no está llena de pétalos de rosa.





EJÉRCITO DE CHILE ALISTA MASIVA COMPRA DE ARMAMENTO QUE INSTALARÁ EN FRONTERA CON PERÚ

La Razón de Perú (www.larazon.com.pe/online)
                                                                         
Así como lo viene haciendo con la Fuerza Aérea y la Armada, el Ejército de Chile se alista a modernizar todas sus unidades terrestres y antiaéreas, poniendo énfasis en el fortalecimiento bélico en la frontera con Perú.
Así lo revela un informe contenido en el Anuario Latinoamericano de la Defensa 2012, una publicación internacional especializada en temas militares y de seguridad.
Aunque el gobierno de Sebastián Piñera ha mantenido el discurso de sus antecesores, respecto a que las nuevas compras bélicas obedecen al retiro de unidades obsoletas y que se centran en aspectos meramente defensivos, el detalle difundido por el referido documento evidencia que en la mayoría de los casos se trata de armamento ofensivo y que solo podría ser usado en una guerra.
Así podemos observar que con la finalidad de fortalecer el Comando Conjunto Norte, encargado de la defensa de la frontera con Perú, el Ejército lo dotará de un sistema de telecomunicaciones y de mando y control de los órganos de maniobra terrestre (Proyecto Baquedano), equipos de detección y observación de las unidades de exploración de la brigada acorazada (Proyecto Travesía), y medios de guerra electrónica (Proyecto Thor).
Dicha arma también se alista a recibir un nuevo grupo de artillería autopropulsada de M-109A5 de 155 mm adquirido en EEUU, cuya modernización fue adjudicada a BAE Systems por un valor de 15,8 millones de dólares. Igualmente llegará en los próximos meses a suelo chileno 1200 nuevos vehículos de transporte para Infantería, 21 adquiridos en Bélgica M-108 VBCL para unidades de Artillería, 48 del tipo M-548 comprados en Canadá para el transporte de munición de artillería para 3 grupos de 155 mm AP, y vehículos Land Rover Defender de transporte.
Igualmente prevén adquirir cohetes LAR (Proyecto Nekulpan), lanzamisiles A/BL, sistemas de artillería antiaérea cercana para la protección de las brigadas acorazadas, cohetes MK-IV para LARS-160, y munición para artillería, morteros y sistemas AA (Proyecto Kutral). Asimismo, se concluirá la Tercera Brigada Acorazada en Antofagasta y 3 batallones de Infantería Blindada.
Esta información resulta preocupante si se tiene en cuenta que en Chile ya se habla de su posible derrota frente a Perú en el diferendo marítimo que se delibera en la Corte de La Haya, en tanto aparecen voces desde el ámbito político que aseguran que no deben acatar un fallo adverso, lo que inminentemente motivaría una acción militar.
Más equipos
Modernizarán 180 VCI Marder 1A3 para acompañamiento de los Leopard 2A4 en las brigadas acorazadas (Proyecto Centurión); y adquirirán de 12 a 16 helicópteros de ataque y aviones no tripulados UAV de reconocimiento y exploración.
El Ejército comprará sistemas de alerta temprana para su frontera norte, sistemas de visión nocturna de 3ª y 4ª generación; y continuarán la modernización de M-113 Y Mowag 6x6.
Respecto a armamento menor, reemplazarán parte de los fusiles de asalto, rediseñarán y reemplazarán puentes Biber Clase 50 de aluminio por otros de acero, terminarán la construcción del tercer centro de mantenimiento industrial en FAMAE (Talagante),
Finalmente, se indica que fabricarán estanques de combustible de 4000 I para instalar sobre vehículos militares M-548, granadas de mano, munición de tanques, flecha y HESH, subfusiles SAF 200 y subfusiles SIG 556.

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